La ganancia de peso toma relevancia en estas fechas. Todos/as os echáis las manos a la cabeza, y con mucha razón…
Porque sólo en estas semanas navideñas podemos consumir las mismas calorías que necesitaríamos para un mes entero, y ganar por lo tanto, todo el peso perdido. Presta atención a esta tabla:
Para no echar por tierra todo el esfuerzo realizado, te aconsejo seguir estas recomendaciones que te ayudarán a controlar esos “kilitos de más” y sobre todo, no perjudicar tu salud.
- Aunque hay días especiales, intenta que esos días sólo sean momentos especiales. De tal forma, que controles los hábitos alimentarios. Realizando las 5 comidas al día, bebiendo mucha agua, un desayuno equilibrado y por supuesto no saltarte la fruta.
- Olvida decir en sociedad la frase “No como esto porque estoy a dieta”, tras ese comentario, el intento de cualquier persona de tu alrededor es restar importancia a tu momento saludable y convencerte para que consumas ese alimento, con la típica frase “estamos en navidades, no pasa nada por un poco”. En fin, ante esta clase de situaciones te aconsejo que es mejor decir: “Hoy me he despertado con la barriga mal y por eso no lo como, me da ardores, ese alimento me sienta mal”. Y con la bebida igual, que bebes agua o un refresco y te incitan a echarte alcohol, diles que tu vaso de agua con el trocito de limón es un gintonic y ¡Dejarán de darte la lata!
- “No cometas el error de comer menos ese día para compensar las calorías, eso sólo servirá para poner en alerta a tu organismo”. En momentos de ayuna prolongados la insulina aumenta en busca de más energía y el deseo por alimentos energéticos puede prolongarse. Así que la mejor opción es que la siguiente comida sea ligera, sana y a su hora.
- Si vas al evento sin hambre y con una fruta recién comida, verás que controlarás mucho más el picoteo.
- Comienza el evento bebiendo agua. El exceso de alcohol daña tu organismo y no aporta nutrientes. La cerveza sin alcohol también es energética 28 kcal cada 100 ml, pero más saludable que sus versiones con alcohol, otra opción son bebidas gaseosas light, aunque nutricionalmente no sean tan convenientes.
- “De todo, pero poco”. Si quieres comer de todo lo que hay en la mesa, que sea en pequeñas cantidades y en un plato pequeño, y ¡No repitas!
- Evita comer “esos aperitivos”, casi siempre rebozados o con salsas que pueden aportar finalmente las mismas calorías que el plato principal.
- Elije si puedes pescado o carnes magras sin rellenos y quitándoles la piel, apartando lo que creas que no vas a comer, y evitando el exceso de salsa. Siempre mejor pescado que carne.
- Sustituye postres o licores por café o infusión.
- Recuerda que la mejor forma de eliminar excesos es retomar cuanto antes los hábitos saludables, así que verduritas, mucha agua y ¡Muévete! tienes que hacer más ejercicio para compensar esas calorías extras.
No siempre el esfuerzo preventivo se ve recompensado por los resultados. Y es frecuente que nos encontremos que nuestro peso se ha “desviado hacia arriba” y pasa a acompañarnos hasta el siguiente exceso alimentario. En realidad puedes romper ese círculo siguiendo estos consejos nutricionales, y dejar de entrar en ese porcentaje del 65% o lo que es lo mismo 2 de cada 3 españoles con obesidad, y todas las enfermedades que le acompañan.