A menudo observo que muchas familias no saben las diferencias que hay entre las alergias e intolerancias a los cereales y al gluten.
Como ya sabes, además de ser nutricionista materno infantil, soy experta en alergias e intolerancias alimentarias, así que voy explicarte la diferencia entre estas patologías.
En primer lugar, un alimento provoca alergia cuando tras consumirlo se presentan síntomas de enfermedad.
Estos síntomas se desencadenan como defensa de nuestro organismo contra sustancias externas que el sistema inmune intenta neutralizar.
Las proteínas de cualquier alimento son susceptibles de provocar una reacción alérgica aunque algunos alimentos desencadenan alergias con mayor frecuencia.
Como en cada país se tienen costumbres alimenticias distintas, la frecuencia de la alergia que provocan los alimentos es diferente en cada lugar.
De manera que, cuánto más se consuma un alimento en un determinado país, más casos de alergia a ese alimento se encuentran.
Por ejemplo, la alergia al trigo es más frecuente en nuestro país, Gran Bretaña o Estados Unidos, mientras que la alergia al arroz es más frecuente en Japón o China.
Síntomas de la alergia a los cereales
La alergia a los cereales está mediada por el anticuerpo IgE y provoca los siguientes síntomas tras su consumo:
- Puede aparecer enrojecimiento en la piel, hinchazón de párpados y labios, urticaria y dermatitis.
- A nivel digestivo puede desencadenar vómitos, dolor, diarreas, picor de boca y garganta.
- Mientras que en el aparato respiratorio puede ocasionar rinitis y/o asma.
En casos muy graves podría llegar a afectar a varios órganos y sistemas al mismo tiempo dando lugar a un shock anafiláctico.
Para poder confirmar el diagnóstico se debe realizar un examen físico que consiste en realizar: una prueba cutánea, una punción epidérmica y una analítica.
El tratamiento principal de la alergia a los cereales consiste en excluirlos de la dieta, pero es importante destacar que se puede tener alergia sólo a un cereal o a varios.
Por eso, es preciso que el alergólogo realice antes una valoración exhaustiva del caso para evitar la retirada de cereales que no provoquen alergia.
Celiaquía
Por otro lado, la celiaquía es una enfermedad autoinmune multisistémica provocada por el gluten y las prolaminas (glucoproteínas vegetales de los cereales).
La diferencia principal es que en la alergia a los cereales interviene el anticuerpo IgE mientras que en la celiaquía no, ya que se trata de una enfermedad inmunológica no alérgica.
Cuando una persona celíaca consume gluten su organismo genera una respuesta autoinmune que daña la mucosa del intestino y destruye las vellosidades intestinales.
Si estas vellosidades están muy afectadas son incapaces de absorber los nutrientes de los alimentos correctamente lo que puede repercutir negativamente en la salud.
Otra diferencia entre la alergia a los cereales y la celiaquía es la sintomatología que presentan.
Aunque comparten muchos síntomas digestivos, la celiaquía también se caracteriza por:
- Pérdida de peso, de masa muscular y de apetito
- Fatiga
- Retraso del crecimiento
- Anemia
- Alteraciones del estado de ánimo
El problema es que estos síntomas pueden no estar presentes, lo que dificulta el diagnóstico mientras las vellosidades intestinales se van destruyendo.
Se diagnostica llevando a cabo una serología, pruebas genéticas, una biopsia intestinal y por último, se comprueba si con la retirada del gluten de la dieta se produce una mejoría.
El tratamiento consiste en eliminar estrictamente de la dieta cualquier alimento que contenga gluten o trazas de gluten.
Intolerancia al gluten
Actualmente se está investigando si la sensibilidad o intolerancia al gluten no celíaca es debida al gluten, a algún componente del trigo o de los cereales.
Se considera que una persona es sensible o intolerante al gluten cuando:
- Manifiesta síntomas digestivos similares a los de la enfermedad celíaca pero no padece la enfermedad.
- No tiene alergia al trigo ni al gluten.
- Se produce una mejoría cuando se retira el gluten de la dieta.
- Empeora cuando consume alimentos con gluten.
Por tanto, para poder diagnosticar la sensibilidad o intolerancia al gluten previamente se debe descartar la celiaquía y la alergia a los cereales.
Una vez que se confirma que no existen estas patologías, se retira el gluten de la dieta durante 4-6 meses y se observa si hay una mejoría.
Después se vuelve a reintroducir el gluten y se comprueba si vuelve a aparecer la sintomatología digestiva.
El tratamiento consiste en evitar el consumo de alimentos con gluten, aunque algunos expertos aseguran que no es preciso hacerlo de forma estricta.
Espero que este artículo te oriente si has notado algún síntoma después de que tu peque consuma cereales o gluten.
Aunque en la infancia lo mas común es padecer alergia a la leche, el huevo y el pescado.
Ya sabes, si necesitas ayuda con la alimentación de tu bebe o peque y además tiene alguna alergia, recuerda que puedo ayudarte como nutricionista experta en alergias e intolerancias alimenticias.
No dudes en contactarme para reservar una asesoría personalizada conmigo y que pueda ayudaros.
Jéssica Gutiérrez
Nutricionista NºColg AND00713